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Índice de la fecha

1 - "Almirante  argentino arbitrariamente detenido por no aceptar jurisdicción de tribunal español en nuestro territorio soberano - El Alte. Jorge Ferrer, ex Jefe de la Armada, ha honrado a la Nación y a su uniforme".

2 - Entre varias buenas notas, una de las que mejor describen esta vergüenza nacional y el arbitrario atropello institucional a la gloriosa Fuerza Aérea Argentina - De ¨La Prensa¨: "La mancha de tuco" por Gastón Pérez Izquierdo.

3 - Cartas de lectores respecto a la purga estalinista de la Fuerza Aérea: ¿Deseo preguntar?, por Horacio Salduna.

4 - De Urgente24: "Confirmado: Kirchner conocía el escándalo de SW y echó a Rodhes para ocultarlo". ¿Qué hará con Aníbal Fernández?.

5 - Extraído de un artículo de Ricardo Romano: "Buena pregunta".... ¿Quién es Baltasar Garzón para que el Gobierno de una Nación soberana le rinda cuentas?.

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1 – Respecto a los sucesos de los días 23 y 24 de febrero en teleconferencia de Tribunales de Comodoro Py con justicia española intrusa,  les informamos  de primera fuente lo que la mayoría de los medios aun desconocen, deforman u ocultan

Un nuevo atropello a la justicia protagonizado por el insólito juez federal Bonadío y con responsabilidades del poder ejecutivo

“Almirante  argentino detenido por no aceptar jurisdicción de tribunal español en nuestro territorio soberano - El Alte Jorge Ferrer, ex Jefe de la Armada, ha honrado a la Nación y a su uniforme”

Día 23 febrero

*  Los propuestos por Scilingo como testigos de su defensa  vía teleconferencia - unos ocho aproximadamente -  excepto el Dr. Torres de Tolosa que lo hizo por separado, presentaron vía sus abogados el día  23 a la mañana sendos escritos similares al juez Bonadio, indicando en resumen:

1) Que no van a declarar para no avalar la maniobra de la presentación a la teleconferencia, por desconocer totalmente a la  justicia española, que es incompetente y usurpadora en el caso.

2) Que además no lo harán por estar casi todos procesados -  ¨ilegalmente pero de hecho¨ -  en esa causa, lo cual implicaría declarar contra ellos mismos.

3) Que de acuerdo a varias leyes en vigor citadas en el escrito y a la constitución de 1994, es obligación del juez Bonadio y del Fiscal del caso Rívolo el expedirse con un fallo opuesto a tal invasión jurídica española, por lo cual le pidieron formalmente que cumplan tal deber, con reserva federal de apelar  en caso de que se nieguen.

* El juez aceptó el escrito y lo comunicó por fax a España, dijo que era derecho de los citados el no declarar y no reconocer el tribunal, pero dispuso que deberían  concurrir a ratificar en persona los dichos de tal escrito al tribunal oral.

* El mismo 23 concurrieron tres oficiales de dicho grupo y ratificaron su negativa a declarar y el no reconocimiento del tribunal español, sin otras consecuencias.

Día 24

* Se presentó el Capitán de Navío Jorge E. Perren a ratificar ante sala juicio oral el escrito del día anterior.

Al serle preguntado por Bonadio (con los jueces españoles en teleconferencia simultanea) si él declararía o no como testigo de Scilingo, respondió textualmente: "Que no lo haría en modo alguno,  fundamentalmente por desconocer absolutamente al tribunal español por incompetencia territorial, tanto como ciudadano argentino como en su carácter de miembro de la Armada y además por atenerse al art. 18 de nuestra Constitución. Agregó que con todo respeto al Reino de España, debía recordarle que nuestra Nación es independiente desde 1816"....

Pese a ello fueron leídas desde España las preguntas que habían preparado para el caso y ante una nueva pregunta de Bonadío sobre si respondería alguna, dijo: "Señor juez argentino, ya he dicho y reitero que desconozco todo paso procesal y pregunta española, solo estoy aquí por respeto y acatamiento a la justicia argentina. No avalaré al tribunal español incompetente en forma alguna”

* A continuación pasó el Capitán de Navío Pazo a quien le fueron hechas iguales preguntas, dando firmes respuestas del mismo tenor de las anteriores.

* A continuación pasó el Almirante Ferrer, quien no está amparado por proceso en la causa y se negó terminantemente a declarar para no avalar al tribunal español y en defensa de la soberanía judicial argentina, pese a las reiteradas presiones de parte del juez Bonadio y el casi patético diálogo entre este y su par español ´pasándose la pelota´ en vivo y en directo sobre quien decidía que hacer con el Almirante.

Finalmente, Bonadio decidió arrestar al almirante (podría hacerlo hasta por 48 horas si esto fuera un juicio argentino, en este caso esta cometiendo abuso de autoridad) mientras evalúa si lo procesa por desacato.

Esto implica una tremenda trampa legal y política para la justicia y el gobierno, de cuyo armado son ellos los responsables, por burda demagogia populista y malversación de los derechos humanos; dado que el tratado de cooperación es para uso entre JUECES COMPETENTES DE AMBAS NACIONES, pero no para violar tramposamente pasos procesales que deben ser manejados vía sistemas de extradiciones. Por vulnerar claros preceptos constitucionales, nuevamente la justicia y jurisdicción soberana argentina es burlada por los que deben defenderla

El gobierno (publicitada reunión de Bielsa con el ex erpiano Slepoy) acordó este mamarracho ilegal y Bonadio se prestó al juego. Todo fue macanudo mientras fueran testigos ex montoneros contra Scilingo, pero cuando este aviesamente pidió testigos entre ex camaradas de armas suyos, se produce el sainete vergonzoso.

Bonadio tiene desde el día 23 próximo pasado pedido por el  escrito arriba citado el pronunciarse contra la intrusión española y ahora con este arresto de hecho la avala, traiciona sus deberes. Ya los abogados defensores están apelando el tema y haciéndole además una denuncia personal.

Gobierno, ONGs de izquierda, muchos políticos y periodistas, muchos miembros de la justicia están traicionando abiertamente la soberanía argentina, pero como contrapartida un señor almirante encabeza una reacción digna y de patriota argentino

El tribunal intruso español ha sido puesto en su lugar.

Prensa Independiente

(Próximamente pondremos a disposición de los lectores copia completa del escrito arriba mencionado y del presentado por separado por el Dr. Abogado Torres de Tolosa)

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2 – Entre varias buenas notas, una de las que mejor describen esta vergüenza nacional y el arbitrario atropello institucional a la gloriosa Fuerza Aérea Argentina

Publicado en ¨La Prensa¨ - 25 de febrero del 2005

“La mancha de tuco”

por Gastón Pérez Izquierdo

El escándalo originado por las drogas que se despacharon a España sigue creciendo, y es probable que continúe haciéndolo en la medida que el propio gobierno trate de separarse de él. Le ocurre como al explorador que en forma sorpresiva cae en una ciénaga y cuanto más denodados son sus esfuerzos por librarse de esa succión misteriosa, más se hunde en sus entrañas. O - como diría una expresión popular - igual que la mancha de tuco, que más se extiende cuando mayor es el empeño del individuo en frotarla con una servilleta para que desaparezca.

En rigor de verdad, la trama que rodea este episodio es compleja, aunque es posible que el Gobierno, y en especial el Presidente, no hubieran quedado atrapados entre sus pliegues si con tanta desesperación no intentaran excluirse.

Más notorio es el gesto cuanto mayor es su empeño en transferir culpas a los demás. En primer lugar, si existió una responsabilidad objetiva de la Fuerza Aérea porque Ezeiza está en su jurisdicción, ¿el comandante y la cúpula responden por la presunta falla de un subordinado? ¿Aun si muchos de ellos fueran héroes de guerra?

En ese caso difícil sería no encontrar culpa en el ministro de Defensa, a quien, por la teoría del dominio de los hechos, correspondería hacerle responsable por los actos de sus lugartenientes.

Y el propio Presidente de la Nación, que es el comandante en jefe de todas las fuerzas ¿no debería responder por los actos de los mandos que de él dependen? Si el camino elegido es el de las culpas por el cargo que se ejerce, la cadena de responsabilidades crece hasta la cima.

Sin embargo, puede suponerse que ciertos sectores gozan de un bill de indemnidad, en tanto existan chivos expiatorios sobre los cuales cargar culpas. ¿Qué podría suponer el observador ante la afirmación de que la empresa con la cual se llevaron a cabo los transportes de drogas "nada tiene que ver con el Estado"? Esta excusa subestima las inteligencias, porque ¿alguien puede aceptar que una entidad comercial deficitaria como SW, al borde del colapso, carece de vínculos con el mismo gobierno que le asigna subsidios cuantiosos y la salva del derrumbe, asociándola a una empresa del Estado?

Es posible que algunos funcionarios, absortos por el canje de la deuda y las alternativas de la negociación con los bonistas, hubieran desoído los informes de inteligencia que llegaban a sus manos, alertando acerca del tráfico ilegal. En cambio es obligatorio suponer que el ministro del Interior debiera haber tenido noticias de los organismos de investigación que de él dependen acerca de la magnitud del delito. Si bien el escándalo salió a la luz recién ahora, estaba detectado desde septiembre de 2004. ¿Desdeñó la información o nunca llegó a sus manos? Y una duda de no menor jerarquía: ¿la transmitió a su superior político? En cualquier caso, en lugar de una amonestación recibió un reconocimiento: la seguridad de los aeropuertos ahora está en su órbita. Y el secretario de Transportes o el director de Aduanas, áreas vinculadas a este tráfico ilegal ¿eran extraños al tema? ¿No tendrán sanciones?

La causa judicial data de octubre del año pasado. ¿No será responsabilidad del ministro de Justicia alertar sobre su existencia? Todo ello sin contar que las investigaciones en España comenzaron antes ¿cabría al canciller estar al tanto de las consecuencias que se abatirían sobre nuestro país?

En esa maraña de culpas, muy pocos en el poder parecen estar ajenos a una conexidad necesaria.

Pero el Gobierno, como suele hacer cuando los delitos violentos colman la tolerancia de la sociedad, parece no buscar la verdad: trata de demostrar energía y despegarse.

Para eso, lo mejor es cortar cabezas; de uniformados, por supuesto. No importa si es justo y que esta vez se trata de la promoción que bautizó sus alas en el Atlántico Sur, defendiendo la patria, desafiando a la "armada que manda sobre las olas".

Gastón Pérez Izquierdo 

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3 – Cartas de lectores , por Horacio Salduna - 24 de febrero de 2005

¿Deseo preguntar?

Señor Director:

Respecto a la purga estalinista de la Fuerza Aérea deseo preguntar:

¿Quién tenía más obligación de informar los hechos al presidente?

¿El Ministro de Defensa o el brigadier jefe de la Base Aérea de Córdoba? ¿El Secretario de Transporte o el brigadier jefe de la Base Aérea de Mendoza?

¿El Director de la Aduana, ya que se trató de un contrabando, o el brigadier Jefe de Personal de la FA?

¿El Jefe de la SIDE o el brigadier Director de la Escuela de Aviación Militar?

¿El Embajador en España, acusado de asesinar en 1976 al capitán de la Armada retirado Jorge Bigliardi, en su calidad de montonero alias “soldado Emilio” y que fue el primero en enterarse de las valijas en Madrid o el brigadier Jefe de Material de la FA?

Dijo el presidente que los héroes de Malvinas no están por ello autorizados para hacer cualquier cosa. Tampoco se los puede echar y acusar de cualquier cosa.

 Horacio Salduna

[email protected] 

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4 – De Urgente24 - 25/02/2005

Partes principales:

“Confirmado: Kirchner conocía el escándalo de SW y echó a Rodhes para ocultarlo”

¿Qué hará con Aníbal Fernández?

* Aníbal Fernández, ministro del Interior, se anticipó a una queja de Interpol y a un escándalo que podría complicar su carrera política, y aceptó lo obvio: que él había conocido la información del tráfico de cocaína hacia Madrid.

* Sin embargo, el Presidente se mantiene en su mentira original, cuando ya es evidente que él también lo sabía y que, entonces, es ridículo el relevo del brigadier Carlos Rohde, al menos acusándolo de ocultarle información.

* ¿Qué hará la opinión pública con el Presidente? ¿Se atreverá éste a pedir las disculpas por su mentira?

* El Ejecutivo Nacional había decidido negar su conocimiento previo, y éste fue el concepto que prevaleció en el despido intempestivo del brigadier Carlos Rohde, y otros jefes de la Fuerza Aérea Argentina.

* La pregunta ahora es, ¿por qué Kirchner echó a Rohdes y no Aníbal Fernández, ministro del Interior?

* El ministro Fernández confirmó que en octubre Interpol internacional avisó a su sede argentina sobre las valijas halladas en la cinta transportadora del aeropuerto.  Y el 26 de noviembre, la Federal recibió la comunicación escrita desde Madrid acerca de las actuaciones en trámite por un hallazgo de la Guardia Civil. Fernández argumentó que se desconocía la posible participación en el delito de funcionarios de la Fuerza Aérea. Sin embargo, ¿qué gravedad le asigno al asunto?

* El juez Carlos Liporace, que tomó la causa en octubre, dice haber enviado varios oficios a dependencias gubernamentales.

* El 7 de enero, el titular de la Aduana, Ricardo Echegaray, recibió un escrito explicando que la Justicia buscaba por narcotráfico a Walter Beltrame, hijo del entonces jefe de Ezeiza, comodoro Alberto Beltrame. ¿Quién puede creer que Echegaray, ya enterado, no informaría a Kirchner.

* La Aduana, a su vez, comunicó la información una semana después al organismo del que depende, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).

* La Secretaría de Inteligencia conocía el tema desde septiembre, por comunicación de su base en Madrid. ¿Acaso la Side le ocultó la información a José Francisco Larcher y Héctor Icazuriaga, los jefes políticos designados por Kirchner? Una vez enterados ellos, ¿quién puede creer que le ocultaron el dato, en las reuniones matutinas cotidianas, a Alberto Fernández, jefe del Gabinete de Ministros?

* Una vez enterado Fernández, ¿no le contó al Presidente, siendo que le cuenta hasta lo que comentan los periodistas de la TV por cable?

* El 5 de octubre, Southern Winds llevó el tema ante la Justicia en lo Penal Económico y el juez Carlos Liporace pidió la captura del hijo del jefe del aeropuerto internacional el 28 de diciembre. Es probable que el lobotomizado ministro de Defensa, José Pampuro, no se haya enterado pero, ¿la base Ezeiza de la Side no le informó a su jefe directo, Jaime Stiusso? Imposible. ´

* ¿Y Southern Winds denunció ante Liporace sin anticiparle a Ricardo Jaime, secretario de Transportes, lo que denunciaría? Imposible.

* ¿Jaime se enteró y no le dijo a Kirchner? Imposible, si le cuenta hasta los modelos de zapatos nuevos que se compra, su obsesión.

¿Y ahora qué? Saber que se tiene un conjunto de funcionarios mentirosos y un Presidente sospechado de mendaz, ¿en qué le cambia la vida a los argentinos? ¿Afectará esto el 'blindaje' que protege ante la opinión pública al presidente Kirchner? ¿Le permitirá a Roberto Lavagna protagonizar mejor que Kirchner el triunfo aparente del canje?

¿Por qué Rohde fue despedido y Aníbal Fernández permanecerá en Interior cuando es evidente que decidió priorizar su ascendente carrera política y no quedar salpicado en un previsible escándalo?

Todo esto es secundario frente a una realidad: el Presidente debe pedirle disculpas a la sociedad argentina por haberle mentido una vez más, pero en este caso dejando evidencias por doquier.

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5 – Atención de Horacio P. Zaratiegui

Extraído de un artículo de Ricardo Romano:

“Buena pregunta”

....¿Quién es Baltasar Garzón para que el Gobierno de una Nación soberana le rinda cuentas?

* Evidentemente, el tema no es el juez sino esta administración, compuesta por hombres que tienen un problema de desubicación en la realidad: no saben qué lugar ocupan y qué responsabilidades tienen ante la Patria, ante los argentinos y ante la Historia. 

* Más vale que vayan tomando conciencia porque si no serán los argentinos los que un día van a preguntarse quiénes son ellos para humillar al país una y otra vez en el escenario internacional con su inconducta.

* Cuando Argentina - bajo la actual administración - renunció a su soberanía jurídica, permitiendo, facilitando incluso, que ciudadanos argentinos fuesen juzgados por tribunales extranjeros, señalamos que una Nación que no se respeta a sí misma no puede aspirar al respeto de sus pares.

* Sólo la ignorancia política y el déficit de patriotismo pueden llevar a alguien a creer que semejante abdicación de nuestros derechos como Nación independiente, practicada por los mismos que deben representarla en la escena internacional, no tendría consecuencias. Y esto recién empieza. (...)

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